RECONOCE TUS MIEDOS Y ENFRÉNTALOS.

 

RECONOCE TUS MIEDOS Y ENFRÉNTALOS.

Una noche me desperté, sudando, asustada, con una incapacidad para moverme y con la  sensación de estar en  peligro. 

 

 Uno de mis miedos más profundos y que más a golpeado mi temple, han sido los terrores nocturnos” Hoy  no me voy a referir a ello directamente, pero quiero ir soltándolo poco a poco, para ir sanando mis desvelos.

 

Quiero imaginar   que todos en algún momento de nuestra vida hemos acudido al valor, esa  capacidad interna para afrontar una situación que, en su momento, creímos que nos devastaría, que no podíamos con ello o que nos mataría. Como me ha pasado a mí, creía morir en cada episodio de terror nocturno. Los grandes miedos tienen esa particularidad de hacernos creer que somos frágiles, nos hacen imaginar catástrofes contrarias a nuestros deseos.  Lo peor es dejarnos paralizar por ellos.

 

Un libro que me leí recién,” Libera tu magia “de Elizabeth Gilbert, habla de identificar ese miedo que necesitas y el miedo que no necesitas. Expresa que el miedo siempre estará en nuestra vida justo en eso momentos donde vamos a hacer innovadores. Es necesario crearnos una vida donde el miedo haga parte y se unte de creatividad, de tal manera que este no la elimine. 

 

 Al dejar espacio en nuestra vida al miedo, aprendemos a reconocerlo y utilizarlo como trampolín para esforzarnos, llenarnos de valor, disciplina y dedicación.

 

 

Mi experiencia en encontrar el valor para lograr un sueño ha estado en accionar, en la medida que avanzamos; los miedos se van desvaneciendo, dar los pasos necesarios es el camino.  Claro está, que existen peligros reales que siempre hay que contemplar. Aprender  a identificarlos es necesario. Hay una filosofía que habla de ello y es la  estoica “Aprender a identificar qué cosas dependen de nosotros y cuales están fuera de nuestro control.”

 

Una tarea es aprender  a preocuparnos solo por lo que podemos controlar, así la vida es más amena y concentramos nuestra energía, en las cosas que podemos hacer que pasen.

 

Tengo una experiencia personal que comparto, cuando quiero invitar a reconocer los miedos. En el año 2022, planee un viaje con mi mamá a un municipio de Colombia que se llama Villa de Leyva, una de las cosas que mas me atraía del lugar es su plaza, estimada unas de las plazas mas grandes del mundo, estar ahí y mirar las montañas que la rodean, me parecía lindo. Es un lugar muy colonial y hermoso.

 

 Justo por esos días de planeación del viaje, una influencers de viajes, mostró en su canal de Instagram, este destino y en él, unas atracciones extremas, bicicletas aéreas. En  mi mente me dije: que bacana, yo quisiera. Pero, me da miedo.

 

Me da miedo, antes de hacerlo ya me estaba condicionando. Anticipé mi  terror, me puse pensamientos limitantes.  Pero algo dentro de mí, me inquietaba. Aún con esos pensamientos, la  idea de subirme en ellas, me ronroneo en la cabeza por muchos días. Recordé estas palabras “Tenemos que practicar el miedo, de una manera progresiva, sin causar un daño en nuestra salud.” Tal ves las leí por ahí y me llegaron ese día a la mente.

 

Mi intuición me habló y me invitó a ir  a un parque de atracciones mecánicas de la ciudad donde vivo a practicar mi miedo. Pero; necesitaba un cómplice, esa persona que tenía el coraje que me faltaba a mí, tal vez su energía me contagiaría, pensé.

 

 Así que invité a una prima, que tiene una actitud aventurera. Llegamos al parque.  Mi objetivo número uno, fue subirme a la atracción mecánica kamikaze y aún con miedo abrir los ojos, esa era la expectativa, estar ahí gritando aún con  miedo, pero con los ojos abiertos. Ya antes había tenido esta experiencia en él y no había sido muy satisfactoria, todo el tiempo grité: ¡bajéenme de aquí!  

 

Previo a ese subimos a otra atracción, que activó mi adrenalina. Días después estaba caminando en Villa de Leyva en dirección al parque de las bicicletas aéreas. El recorrido fue  más o menos de  30 minutos desde la carretera donde nos dejaba el bus, hasta el parque de aventuras, quedaba retirado del casco urbano. Yo no me podía regresar a casa,  sin hacer lo que me había prometido. Desafiarme.

 

Mi mamá y yo, sin conocer anduvimos a pie por eso  caminos veredales, en ningún momento sentimos miedo. En el camino   nos encontramos a una persona en  el inicio  del recorrido  y luego llegando al parque, a una señora recogiendo frijoles. 

 

Por ahí tengo el video de mi experiencia en las bicicletas  aéreas, miedo sí, un poco, esta experiencia me permitió sentirme bien conmigo misma. Terminé haciendo canopy Superman también. Había un cable especie de un Bungee Jumping, pero; al final desistí no hacer ese, lo que  había hecho ya; era demasiada exigencia para mí.

 

 A este viaje lo he catalogado, el mejor viaje de mi vida, un viaje a mi capacidad de hacer las cosas que  creí no capaz. No sé cómo expresar, lo que yo sentí en mi interior, era un orgullo y una satisfacción conmigo misma ¡Qué bueno que lo hiciste, Lili!  Cuando me preguntan: ¿No te dio miedo? digo: No; eso no da miedo. (Miento un poco, para dejar una luz de también lo haré, en el otro).

 

Qué  hay detrás de esas personas que admiramos, qué es lo que nos gusta de ellas, qué cosas nos hacen verlas valiosas, qué ha tenido que pasar una persona que hoy es una gran oradora, un empresario o inventor de éxito. Cada persona tiene una historia detrás y aunque nuestros miedos no son iguales, en un momento de la vida se ha requerido  de valor para dar un paso. Así que encuentra tu propio valor, para caminar en la dirección que has soñado.

 

Quiero dejarte esas cosas que creo nos ayudan a vencer el miedo desde mi experiencia:

  • ·         Practicar el miedo. Encontrar pequeñas acciones diarias que me acerquen a mi miedo más grande.
  • ·         Hacer el oso de vez en cuando.
  • ·         Pregúntate: ¿Qué es lo peor que me puede pasar, si hago esto?
  • ·         Decidirse a hacer lo que nos de miedo. Toma el toro por los cuernos y comprométete a intentarlo.
  • ·         Júntate con personas que te contagien del valor que necesitas.
  • ·         Cree en tu capacidad creativa para encontrar salidas. La creatividad no es solo arte, también son los caminos que encontramos para hacer lo que queremos.
  • ·         Práctica esta frase: Atrévete a hacerlo con miedo.
  • ·         Si hay algo que te está paralizando demasiado, busca ayuda. Un profesional te ayudará a salir adelante.
  • ·         No hagas cosas porque otros te incitan, hazlo porqué es tu decisión.
  • ·         Busca la seguridad en tu interior. Fortalece tu coraje.
  • ·         Aprende de las personas que hacen lo que te da miedo. Puedes preguntarle como lograron ser buenas en eso
  • ·         No tengas miedo y  déjate llevar. Dice esta canción – Oportunidades de Asolas sin mí.
  • ·         Recuerda esto: Solo después de hacer algo, puedo decir; sí o no pude.
  • ·         Ten curiosidad de cómo te sentirás al llegar a la meta, imagina como te sentirás lograrlo.

 

 

 

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario